PLV de Disney diseñado por Mayence para El Corte Inglés
El material de punto de venta (PLV) es una herramienta esencial para captar la atención de los clientes y comunicar la esencia de tu marca de forma efectiva. Diseñar PLV a medida que refleje tu identidad no solo mejora la experiencia del cliente, sino que también refuerza la conexión emocional con tus productos y servicios. A continuación, exploraremos los pasos necesarios para crear un PLV personalizado y efectivo, los elementos clave de su diseño y los tipos de PLV más adecuados para diferentes entornos. ¡Sigue leyendo para no perderte nada!
Pasos para crear un PLV a medida que refleje tu marca
Antes de comenzar a diseñar, es importante sentar las bases que permitirán que tu PLV sea un reflejo auténtico de tu marca y sus valores.
Definir los valores y personalidad de tu marca
El primer paso para crear un PLV exitoso es comprender a fondo los valores y la personalidad de tu marca. ¿Es tu marca innovadora, sofisticada, amigable o sostenible? Estas cualidades deben estar presentes en cada aspecto del diseño del PLV.
Por ejemplo, una marca enfocada en la sostenibilidad como Freshly Cosmetics, podría optar por materiales reciclados y acabados naturales, mientras que una marca tecnológica podría centrarse en líneas modernas y colores metálicos. Tener claridad sobre la esencia de tu marca guiará todas las decisiones de diseño.
Conocer a tu público objetivo: ¿qué mensajes resuenan con ellos?
Un PLV efectivo no solo debe reflejar la marca, sino también conectar con las necesidades y deseos del público objetivo. Investiga quién es tu audiencia, qué los motiva y cuáles son sus hábitos de compra.
Si te diriges a un público joven y dinámico, tu PLV podría incluir colores vibrantes y elementos interactivos. Por otro lado, si apelas a un público más maduro, un diseño elegante y sobrio podría ser más apropiado.
Identificar los puntos de contacto clave en el punto de venta
El siguiente paso es determinar dónde y cómo interactuarán los clientes con tu PLV en el punto de venta. Esto incluye ubicaciones estratégicas como mostradores, estanterías o entradas de tiendas.
Un PLV bien ubicado debe captar la atención rápidamente y guiar al cliente hacia una acción, ya sea conocer un nuevo producto, aprovechar una promoción o reforzar la percepción de la marca.
Un ejemplo es la campaña de Kinder Bueno en supermercados. La marca instala expositores de pie con forma de los icónicos snacks de chocolate, ubicados estratégicamente en pasillos centrales o junto a las cajas registradoras. Estos expositores no solo llaman la atención con su diseño atractivo, sino que también impulsan la compra por impulso al estar posicionados en áreas de alta visibilidad.
Mueble expositor diseñado por Mayence para Elizabeth Arden
Elementos clave del diseño de un PLV efectivo
Una vez definidas las bases estratégicas, es momento de trasladarlas al diseño del PLV.
Uso adecuado del logo y colores corporativos
El logo y los colores corporativos son los elementos más reconocibles de una marca, por lo que deben estar presentes de manera destacada en el diseño del PLV. Sin embargo, es importante utilizarlos con equilibrio, asegurándose de que no saturen el diseño.
Por ejemplo, el color principal de tu marca puede ser el fondo predominante, mientras que los colores secundarios y el logo se utilizan para destacar mensajes clave o productos.
Tipografía coherente con la identidad visual de la marca
La tipografía es un aspecto frecuentemente subestimado, pero tiene un impacto significativo en cómo se percibe la marca. Utiliza las fuentes tipográficas que forman parte de tu identidad visual para mantener la coherencia.
Además, asegúrate de que el texto sea legible, especialmente en un entorno de venta donde los clientes solo tienen unos segundos para captar el mensaje. Fuentes claras y tamaños adecuados son esenciales.
Un ejemplo es la estrategia de Apple en sus puntos de venta y expositores. La marca utiliza la fuente tipográfica San Francisco, que forma parte de su identidad visual, en todos sus materiales de comunicación, incluyendo PLV. Esta fuente minimalista y clara asegura que los mensajes sean fáciles de leer y refuerza la percepción de simplicidad y sofisticación que caracteriza a Apple.
Materiales y acabados que alineen con la esencia de la marca
El material de tu PLV debe complementar la imagen que deseas proyectar. Por ejemplo, una marca de lujo podría optar por acabados en madera pulida o metal, mientras que una marca ecológica podría utilizar cartón reciclado o papel kraft.
Los acabados también son importantes. Un acabado brillante puede transmitir modernidad, mientras que uno mate puede comunicar sobriedad o minimalismo. Selecciona materiales y acabados que refuercen la percepción de tu marca.
PLV para NARS diseñado por Mayence
Tipos de PLV a medida para diferentes entornos
El diseño del PLV también debe adaptarse al entorno donde será utilizado. A continuación, exploramos los tipos más comunes de PLV y sus aplicaciones.
Expositores de sobremesa y displays para mostradores
Estos PLV son ideales para destacar productos pequeños o promociones específicas en áreas de alto tráfico, como los mostradores de pago. Su diseño compacto permite ubicarlos estratégicamente en puntos donde los clientes toman decisiones rápidas de compra.
Por ejemplo, un expositor de sobremesa para cosméticos puede incluir espejos integrados y un diseño visual que refuerce la identidad de la marca. Estos displays son una excelente manera de maximizar el impacto en espacios reducidos.
Estanterías y góndolas personalizadas para supermercados y tiendas grandes
En espacios más amplios, como supermercados o grandes almacenes, las estanterías y góndolas personalizadas permiten exponer una mayor cantidad de productos mientras refuerzan la identidad de la marca.
Estas estructuras suelen incluir gráficos llamativos y un diseño modular que facilita su instalación y reconfiguración según las necesidades. Además, pueden integrar tecnología como pantallas digitales o códigos QR para ofrecer una experiencia más interactiva.
Carteles, vinilos y señales: pequeñas piezas con gran impacto
Los carteles y vinilos son una solución versátil y económica para captar la atención del cliente. Estas piezas son ideales para destacar promociones, guiar a los clientes dentro de la tienda o reforzar mensajes clave de la marca.
Por ejemplo, un cartel con diseño atractivo y un mensaje claro puede colocarse en la entrada de una tienda para anunciar un descuento especial. Los vinilos, por su parte, son ideales para ventanas o superficies lisas, ofreciendo un impacto visual inmediato.
Un ejemplo de esto es el uso de Zara en sus tiendas. La marca utiliza carteles y vinilos en sus escaparates y dentro de sus tiendas para resaltar ofertas y nuevas colecciones. En la entrada, es común ver carteles grandes con mensajes claros y diseños atractivos que captan la atención de los clientes, como “Descuento del 30%” o “Novedades de temporada”. Los vinilos, por su parte, se colocan en las vitrinas o en las paredes interiores, ofreciendo una forma económica de guiar a los clientes hacia productos específicos o destacar promociones sin necesidad de estructuras costosas. Este tipo de PLV ayuda a crear un ambiente visualmente coherente y a maximizar el impacto de las campañas promocionales.
Expositor de mesa para GN Hearing diseñado por Mayence
En definitiva, crear PLV a medida que refleje la identidad de tu marca es una estrategia poderosa para destacar en el punto de venta. Siguiendo estos pasos, cuidando los elementos clave de diseño y eligiendo el tipo de PLV adecuado para cada entorno, puedes asegurarte de que tu marca no solo capte la atención, sino que deje una impresión duradera en los consumidores.
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